Lotus Clinic

Técnica también conocida como gastrectomía vertical. Se basa en cortar una gran parte del estómago para que tenga forma de tubo o manga, reduciendo así el volumen del estómago y convirtiéndolo en una continuación del esófago. El objetivo de esta cirugía es la extracción del 80% del estómago, incluyendo el área del fondo donde se secreta la hormona del apetito. Después de remover la mayoría del estómago, con la disminución de la ingesta de alimentos y la pérdida de apetito, el paciente puede comenzar a perder peso rápidamente.

Esta cirugía está indicada para aquellos pacientes que han intentado diferentes métodos para perder peso sin éxito y que sufren de enfermedades cardiovasculares y/o problemas respiratorios, entre otros, causados o derivados de la obesidad. Este procedimiento se realiza mediante laparoscopia, donde se realizarán 4 pequeñas incisiones para acceder a la cavidad intraabdominal, esta operación tiene una duración aproximada de 60 a 90 minutos.

Antes de someterse a esta intervención, es necesario que el paciente realice diferentes pruebas y exámenes para confirmar si está lo suficientemente sano como para llevar a cabo la operación, se recomienda a los fumadores que dejen de fumar antes y después del procedimiento, ya que fumar ralentiza la recuperación y aumenta el riesgo de problemas.

Aquellas personas que sufren de reflujo gástrico se considera que deben optar por el bypass gástrico como mejor opción.

Normalmente, el paciente puede regresar a casa dos días después de la intervención y debe comenzar una dieta a base de líquidos, luego añadir alimentos blandos, al final del mes podrá consumir alimentos sólidos como de costumbre.

Los beneficios de una manga gástrica superan completamente los riesgos, sin embargo, es importante que esté informado sobre cuáles podrían ser estos riesgos, por lo que también es importante comunicar al médico todos los síntomas que puedan presentarse después de la intervención para una detección temprana, al igual que los controles y revisiones que el médico llevará a cabo.

Una posible fuga puede presentarse como fiebre alta, dolor abdominal intenso, pulso elevado, escalofríos y fatiga. Detectar y tratar una fuga para un médico experimentado es fácil de tratar.

Puede haber riesgo de tromboembolismo, como en cualquier otro procedimiento quirúrgico, por lo que se comienza con anticoagulantes y medias de compresión, además, deberán recibir inyecciones de anticoagulantes en casa durante 10 días adicionales después del alta hospitalaria.